Mientras viajaba desde Montevideo, como cada miércoles, me acompañaba un podcast que me gusta mucho: Retruco. Lo conduce Hernán Zorrilla, más conocido como Toti, un olimareño que piensa en voz alta, pregunta, se contradice, y genera esas conversaciones donde uno se queda reflexionando mucho después de apagar el audio.
En uno de los episodios, Toti entrevista al filósofo Javier Mazza, y entre ideas sobre verdad, certeza y creencia, aparece el tema de la inteligencia artificial. Y de pronto, surge José Ortega y Gasset.
El arado, la IA y el ahorro de tiempo
Mazza parafrasea a Ortega con una imagen muy clara:
“El arado es tecnología que nos permite, justamente, cavar en el campo para sembrar. Antes lo hacíamos con la mano, con la pala. Ahora con el arado. Pero lo que hacemos sigue siendo lo mismo: cavar.”
Y remata con lo esencial:
“Te ahorrás una cantidad de tiempo… pero la verdadera pregunta es: ¿qué va a hacer ahora el hombre con el tiempo que se ahorró?”
Ortega y la pregunta que todavía no contestamos
En su texto Meditación de la técnica, Ortega plantea que el ser humano no se adapta a la naturaleza, sino que la transforma. La técnica, entonces, es esencia de lo humano, no un accesorio.
Pero advierte algo clave:
“Si lo que sucede con el tiempo que el hombre se ahorra gracias a la técnica es que no hace nada… entonces eso no es humano.”
El tiempo que se vacía, o se llena
Mazza retoma esa idea y la traslada a la IA actual. Dice que el problema no es usar herramientas tecnológicas, sino usarlas sin conciencia.
“El verdadero empoderamiento es el pensamiento crítico: apropiarte de tus herramientas, no dejar tu voluntad librada a ellas.”
Porque la IA no crea desde el vacío. No inventa. Repite patrones.
Si vos no sabés qué querés, si no sabés preguntar, si no hay intención…
vas a obtener respuestas mediocres.
¿Qué hacemos con el tiempo que nos devuelve la IA?
No se trata de decir si está bien usar ese tiempo para leer, para dar clase, para jugar con tu hijo o para compartir un asado con amigos.
Se trata de no pasar de largo sin preguntarte nada.
Y ahí vuelve Ortega con toda su fuerza:
“El no hacer no es humano. Lo humano es hacer. Inventar. Crear. Decidir qué sentido tiene lo que hacés con tu tiempo.”
En 33IA creemos que la IA no te reemplaza. Te potencia si estás despierto.
La inteligencia artificial no es un fin.
Es un arado moderno: una herramienta.
Lo importante no es que la uses, sino cómo la usás y para qué.
Desde 33IA, impulsado por INDATA, creemos que la tecnología tiene sentido cuando se pone al servicio de la comunidad, del pensamiento y de la acción con propósito.
Entonces, la pregunta que nos queda para cerrar este artículo no es técnica.
Es profundamente humana:
¿Qué vas a hacer vos con el tiempo que la IA te devuelve?